En 1994, Casa Latina fue fundada cuando un gran número de trabajadores Latinos comenzaron a llegar a Seattle. Hacían filas por días en las calles del vecindario de Belltown esperando un trabajo. Casa Latina comenzó como una manera de organizarse a si mismos y demandar condiciones de trabajo adecuadas y un trato justo. Desde entonces, la organización ha crecido tanto en instalaciones como en su misión. Los inicios de Casa Latina fueron trabajando en la calle y en espacios prestados. Hacia el 2010, se mudó a su actual ubicación en el Central District de Seattle a un complejo de tres edificios.
Lo que comenzó como un intento de organizar a trabajadores día por día se ha expandido a una vibrante comunidad y organización en favor de los derechos de los trabajadores migrantes. Casa Latina ofrece un amplio rango de servicios y programas, adicionalmente a la bolsa de trabajo, también se imparten clases de inglés, nuevas habilidades laborales, entrenamientos de seguridad y organización comunitaria para sus casi 500 miembros. Recientemente, Casa Latina ha abordado también los derechos de empleados domésticos así como entrenamientos de liderazgo para mujeres. Es también un centro cultural y un lugar seguro, un ancla para inmigrantes recién llegados y no tan nuevos. Además de asistir directamente a la comunidad latina del King County, Casa Latina tiene un impacto nacional como un centro de trabajadores modelo cuyos programas, currículo y operaciones han sido compartidos e implementados en otros centros a lo largo del país.
Uno de los tres edificios que ahora funciona como Casa Latina, en la esquina de la 17 y Jackson fue construido en 1951 como una clínica de salud.